Almazara de los Moltó

Se ha reconvertido en Museo Etnológico, donde se guardan la mayoría de utensilios y herramientas que se empleaban para llevar a cabo el cultivo de aceitunas y el proceso de elaboración del aceite. La cantidad de aceitunas que una persona debía recolectar para que se hiciera una “pará” (tanda) era de 12 cestos llenos. A lo que refiere la pará es que era necesario tener una buena cantidad para que mereciera la pena poner en marcha todo el proceso y además algún vecino tenía que dejar de hacer sus labores para ayudar.

Historia

Hasta 1902 se usó para la vendimia colectiva y la producción de vino.

En la década de los 60 quedó en desuso debido al éxodo de población.

En 1992 la Unión Cultural de Amigos de La Vall de Gallinera la adquirió y la restauró.

En 1995 se inaugura como museo etnológico, donde se detalla el proceso de la elaboración del aceite.

Interior

El edificio custodia la maquinaria que se utilizaba en el pasado para obtener aceite: el molino de piedra de tracción animal, prensas… pero también recoge una muestra bien importante de herramientas relacionadas con la confección y almacenamiento del líquido dorado. También se exponen utensilios de trabajos antiguos y otros que servían para cultivar el campo.

Producción de vino

El pisado de la uva se hacía en la entrada del recinto sobre unas maderas y el jugo producido caía en el lagar que aún existe bajo tierra. El mosto se transportaba al exterior a través del caño de “la fuente del vino”, adosado al muro izquierdo.

Producción del aceite de oliva

Las aceitunas se introducen en el molino de piedra para ser trituradas y se consigue una pasta. La molturación del aceite se hacía combinando la destreza manual, con la ayuda de la tracción animal. Después pasaba a la prensa para sacar el zumo dorado.